viernes, marzo 07, 2008

Amar, el continúo Carpe Diem

Este cuento la inventé para el concurso de cuentos eróticos de revista Paula
hace años atrás. No lo mandé porque no lo encontré tan perfecto, aún
tiene fallas, pero algún día será conocido- o quizás nunca-.








Te extraño. Desearía estar contigo.Perderme entre tus brazos, volver a
tener un suspiro de felicidad. Imagino que aún estás aquí, que me has
llamado para juntarnos hoy a las nueve- como solía ser-. Me arreglo,
tomo desayuno y camino con dirección hacia la calle Carpe Diem.

Abro la reja y toco el timbre. Me abres y te ocultas tras la puerta, porque
sólo tienes la camisa que te cobija. Cierro la puerta, mientras rápidamente
tú te acuestas. Me saco la cartera, la dejo en la silla de tu escritorio,
el abrigo lo dejo encima, me saco los zapatos, luego las medias, sigo
con el pantalón, para continuar con mi camisa y quedar solo en ropa
interior.

Y es ahí cuando tú te me acercas, me miras con esa mirada tan fija, tan profunda que desvestía mis sensaciones, que detectaba mis emociones. Tus manos alrededor de mi cuello y me besas apasionadamente. Sigues por mi cuello, mientras tus manos sacan desesperadamente mi sostén y comienzas a jugar,a perderte entre aquellos montes.Se quedan un largo rato ahí, luego me tiras hacia atrás y las besas, comienzas a bajar con tu lengua de fuego para dibujar en mi ombligo, luego en mi pubis y al rededor de mis muslos y te detienes.Te quedas un rato visitando esa zona que hace desfallecer
mi cuerpo y mis sentidos, por un breve lapso me pierdo.

No pasan ni tres minutos y comienzo a gemir, a enloquecer. Te tiro el pelo, te surco tu espalda con mis pies, te beso el cuello, te muerdo los labios y tus orejas. Tomo tus manos y las aprieto como haciendo palanca y comienza el viaje. Un calor recorre mi cuerpo. Nace de mi sexo y se expande a través de mis venas, llegando hasta mis ojos.

Durante ese recorrido, mis pies arden, mis piernas tiritan, mi sexo es una
brasa de fuego, mis senos sensibles hasta el más mínimo roce y mi cuello no resiste nada, desaparece; yo soy etérea.

Mi cuerpo todo mojado, por esta ola de pasión, comienza a explotar cual fuera una súpernova. Vuelo por toda la habitación, entre besos, lenguas, rasguños, golpes,
palabras indecentes, gemidos, pero me voy, dejo de existir. Me convierto en aire y floto lejos como si fuera una pluma acariciada por el viento estival.

De repente vuelvo a la realidad y estás montado sobre mí. Y comienzo a reír, a decir: no basta, para malo, déjame y todas esas palabras que dice la pasión. Por horas abandonamos este mundo y nos vamos lejos entre inciensos, cigarro, alcohol, música y poesía.

Pero sólo imagino. Ya sólo me queda el recuerdo de todos esos momentos de
locura. A lo mejor espero más de ti, a lo mejor me engaño a mí misma diciéndome
que no quiero ser de nadie,porque quiero ser tuya junto a esos momentos.

¿Qué si es mediocre?, ¿qué si es insano y humillante? Esas palabras
no existen cuando es el corazón el que dirige tu camino. Esas palabras la
razón las dice, pero el corazón no las escucha.¡Qué clase de amor sería
ese, que todo lo racionaliza!

¿Se puede amar con razón? Puede que así sea, pero ese no es mi caso.Yo sólo amo con pasión, con locura. Me entrego totalmente, es como si fuera un CARPE DIEM. Para mí eso es amar: un continuo CARPE DIEM.


Fin

4 comentarios:

Sebastián dijo...

"¡Qué clase de amor sería ese, que todo lo racionaliza!"

De alguna forma u otra, me tocó eso...
Soy una persona demasiado extrema: o lo racionalizo todo, o nada... y lamentablemente es algo que me cuesta controlar...

En fin...

Estamos en contacto.
Un abrazo.

poettissa dijo...

Sí de eso me di cuenta. Creo que se debe mucho a nuestra forma de ser, además tú eres ingeniero y yo soy profesora, no podría ser racional, tengo que ser apasionada, una profesora racional para qué, de esas hay varias. En fin , uno es nada más.
Cariños.

Gato dijo...

Es realmente un texto interesante, aunque la reflexión final lo debilita. La razón adviene de la lectura crítica; la pasión, el delirio y la embriaguez le pertenece al trasparente reino de la poesía. De todos modos, revelas en un texto incocluso tu talento...

poettissa dijo...

Gracias gato, por tus comentarios, pero discrepo un poco con tu punto de vista, pero estamos en democracia, y hay que respetar las criticas. Espero que em visites más seguido.
Besos.