domingo, junio 10, 2012

El embrujo de Chopin

Antiguas melodías que solía escuchar, en aquellas noches en que mi alma era mucho más joven, mis ilusiones más temerarias y mi pasión desenfrenada. El incienso perfumaba mi melancolía e invitaba a mis miedos desaparecer. Mis sueños impulsaban mi vida, cosa que todavía no cambio, en un mundo cada vez más realista. 


Si no pudiera soñar, tengan por seguro que me matarían viva. Por eso en estos tiempos, en que hay que batallar para cumplirlos, escribir es mi manera de resistir los monstruos que pueden aniquilarme y quitarme lo único que tengo.


Hoy, al poder compartir con otros seres de resistencia, me siento más en casa, me siento como cuando escucho a Chopin: volando y tan liviana como una pluma que no le teme a volver a caer, porque vale la pena subir a lo más alto del cielo, aunque sea unos segundos. Salir de la burbuja y poder ser libremente.


Claudio Arrau Chopin  Nocturne 2 Op.  9 No  2

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