Orgullo y prejuicio (en inglés, Pride and Prejudice), publicada por primera vez el 28 de enero de 1813 como una obra anónima, es la más famosa de las novelas de Jane Austen y una de las primeras comedias románticas en la historia de la novela. Su primera frase es, además, una de las más famosas en la literatura inglesa: «Es una verdad mundialmente reconocida que un hombre soltero, poseedor de una gran fortuna, necesita una esposa.»
Es una novela de desarrollo personal, en la que las dos figuras principales,Elizabeth Bennet y Fitzwilliam Darcy, cada uno a su manera y, no obstante, de forma muy parecida, deben madurar para superar algunas crisis, aprender de sus errores para poder encarar el futuro en común, superando el orgullo de clase de Darcy y los prejuicios de Elizabeth hacia él.
Es una de las obras más conocidas de la literatura inglesa, gracias a innumerables ediciones, algunas películas (como Orgullo y prejuicio, de 2005), reescrita incluso en forma de un musical de Broadway (1959).
Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar y el caballo en la montaña. Con la sombra en la cintura ella sueña en su baranda, verde carne, pelo verde, con ojos de fría plata. Verde que te quiero verde. Bajo la luna gitana, las cosas le están mirando y ella no puede mirarlas.
*
Verde que te quiero verde. Grandes estrellas de escarcha, vienen con el pez de sombra que abre el camino del alba. La higuera frota su viento con la lija de sus ramas, y el monte, gato garduño, eriza sus pitas agrias. ¿Pero quién vendrá? ¿Y por dónde...? Ella sigue en su baranda, verde carne, pelo verde, soñando en la mar amarga.
*
Compadre, quiero cambiar mi caballo por su casa, mi montura por su espejo, mi cuchillo por su manta. Compadre, vengo sangrando, desde los montes de Cabra. Si yo pudiera, mocito, ese trato se cerraba. Pero yo ya no soy yo, ni mi casa es ya mi casa. Compadre, quiero morir decentemente en mi cama. De acero, si puede ser, con las sábanas de holanda. ¿No ves la herida que tengo desde el pecho a la garganta? Trescientas rosas morenas lleva tu pechera blanca. Tu sangre rezuma y huele alrededor de tu faja. Pero yo ya no soy yo, ni mi casa es ya mi casa. Dejadme subir al menos hasta las altas barandas, dejadme subir, dejadme, hasta las verdes barandas. Barandales de la luna por donde retumba el agua.
*
Ya suben los dos compadres hacia las altas barandas. Dejando un rastro de sangre. Dejando un rastro de lágrimas. Temblaban en los tejados farolillos de hojalata. Mil panderos de cristal, herían la madrugada.
*
Verde que te quiero verde, verde viento, verdes ramas. Los dos compadres subieron. El largo viento, dejaba en la boca un raro gusto de hiel, de menta y de albahaca. ¡Compadre! ¿Dónde está, dime? ¿Dónde está mi niña amarga? ¡Cuántas veces te esperó! ¡Cuántas veces te esperara, cara fresca, negro pelo, en esta verde baranda!
*
Sobre el rostro del aljibe se mecía la gitana. Verde carne, pelo verde, con ojos de fría plata. Un carámbano de luna la sostiene sobre el agua. La noche su puso íntima como una pequeña plaza. Guardias civiles borrachos, en la puerta golpeaban. Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar. Y el caballo en la montaña.
(Esta carta fue remitida a Anaïs por Henry
Miller cuando éste todavíano era un fenómeno editorial).
Queridísima Anain:
Terriblemente,
terriblemente vivo, afligido, absolutamente consciente de que te necesito. He
de verte, te veo brillante y maravillosa y al mismo tiempo le he escrito a June
y me siento desgarrado, pero tú lo entenderás,
debes entenderlo. Anaïs, no te apartes de mí. Me envuelves como una llama
brillante. Anaïs, por Dios, si supieras lo que siento en este momento. Quiero
conocerte mejor. Te quiero. Te quise cuando viniste a sentarte en mi cama -esa
segunda tarde fue toda como una cálida neblina- y de nuevo oigo cómo pronuncias
mi nombre, con ese extraño acento tuyo. Despiertas en mí tal mezcla de
sentimientos que no sé cómo acercarme a ti. Ven a mí, aproxímate a mí, será de
lo más hermoso, te lo prometo. No sabes cuánto me gusta tu franqueza, es casi
humildad. Sería incapaz de oponerme a ella. Esta noche he pensado que debería
estar casado con una mujer como tú. ¿O es que el amor, al principio inspira
siempre esos pensamientos? No temo que quieras herirme. Veo que tú también
posees fuerza, de distinto orden, más escurridiza. No, no te romperás. Dije
muchas tonterias sobre tu fragilidad. Siempre he sentido un poco de vergüenza,
pero la última vez menos. Acabará desapareciendo toda.
Tienes un sentido del humor delicioso; lo adoro. Quiero verte reir siempre. Te lo mereces. He pensado en sitios a donde deberíamos ir juntos, sitios oscuros, aquí y allí, en París, por el simple hecho de decir "aquí vine con Anaïs", "aquí comimos, bailamos o nos emborrachamos juntos". Ay!, verte borracha alguna vez, qué privilegio!, casi me da miedo de proponértelo; pero Anaïs, cuando pienso cómo aprietas contra mí, cuán ansiosamente abres las piernas y qué humeda estás, Dios, me vuelvo loco de pensar en cómo serías cuando todo se disuelve. Ayer pensé en ti, en cómo ciñes las piernas en torno a mí, de pie, en cómo se tambalea la habitación, en cómo caigo sobre ti en la oscuridad sin saber nada. Y me estremecí y gemí de placer. Pienso que si he de pasar todo el fin de semana sin verte, resultará intolerable. Si es preciso, iré a Versailles el domingo - lo que sea, pero he de verte-. No temas tratarme con frialdad. Me bastará con estar cerca de ti, con mirarte admirado. Te quiero, eso es todo.
Mi querida, tu carta de julio me llega en septiembre,
espero que entre tanto estés ya de regreso en tu casa. Hemos compartido
hospitales, aunque por motivos diferentes; la mía es harto banal, un accidente
de auto que estuvo a punto de. Pero vos, vos, ¿te das realmente cuenta de todo
lo que me escribís? Sí, desde luego te das cuenta, y sin embargo no te acepto
así, no te quiero así, yo te quiero viva, burra, y date cuenta que te estoy
hablando del lenguaje mismo del cariño y la confianza –y todo eso, carajo, está
del lado de la vida y no de la muerte-. Quiero otra carta tuya, pronto, una
carta tuya. Eso otro es también vos, lo sé, pero no es todo y demás no es lo
mejor de vos. Salir por esa puerta es falso en tu caso, lo siento como si se
tratara de mí mismo. El poder poético es tuyo, lo sabés, lo sabemos todos los
que te leemos; y ya no vivimos los tiempos en que ese poder era el antagonista
frente a la vida, y ésta el verdugo del poeta. Los verdugos, hoy, matan otra
cosa que poetas, ya no queda ni siquiera ese privilegio imperial, queridísima.
Yo te reclamo, no humildad, no obsecuencia, sino enlace con esto que nos
envuelve a todos, llámale la luz o César Vallejo o el cine japonés: un pulso
sobre la tierra, alegre o triste, pero no un silencio de renuncia voluntaria.
Sólo te acepto viva, sólo te quiero Alejandra.
Escribíme, coño, y perdoná el tono, pero con qué
ganas te bajaría el slip (¿rosa o verde?) para darte una paliza de esas que
dicen te quiero a cada chicotazo. Julio
Título original: Magic in the Moonlight. País: USA, Francia. Año: 2014 Duración: 97 min. Director:Woody Allen . Guión: Woody Allen . Reparto: Emma Stone, Colin Firth, Jacki Weaver, Marcia Gay Harden, Hamish Linklater, Eileen Atkins, Simon McBurney, Erica Leerhsen, Catherine McCormack, Paul Ritter, Jeremy Shamos . Género: Comedia romántica. Calificación: Apta para todo público.
Sinopsis:
Ambientada
en la lujosa Costa Azul de la Francia de los años 20, Magic in the
Moonlight, de Woody Allen, es una comedia romántica que cuenta la
historia de un mago (Colin Firth) que intenta desenmascarar a una médium
(Emma Stone).Esto desencadenará una serie de hechos mágicos que sacudirán la vida de ambos.
No soy Pasolini pidiendo explicaciones
No soy Ginsberg expulsado de Cuba
No soy un marica disfrazado de poeta
No necesito disfraz
Aquí está mi cara
Hablo por mi diferencia
Defiendo lo que soy
Y no soy tan raro
Me apesta la injusticia
Y sospecho de esta cueca democrática
Pero no me hable del proletariado
Porque ser pobre y maricón es peor
Hay que ser ácido para soportarlo
Es darle un rodeo a los machitos de la esquina
Es un padre que te odia
Porque al hijo se le dobla la patita
Es tener una madre de manos tajeadas por el cloro
Envejecidas de limpieza
Acunándote de enfermo
Por malas costumbres
Por mala suerte
Como la dictadura
Peor que la dictadura
Porque la dictadura pasa
Y viene la democracia
Y detrasito el socialismo
¿Y entonces?
¿Qué harán con nosotros compañero?
¿Nos amarrarán de las trenzas en fardos
con destino a un sidario cubano?
Nos meterán en algún tren de ninguna parte
Como en el barco del general Ibáñez
Donde aprendimos a nadar
Pero ninguno llegó a la costa
Por eso Valparaíso apagó sus luces rojas
Por eso las casas de caramba
Le brindaron una lágrima negra
A los colizas comidos por las jaibas
Ese año que la Comisión de Derechos Humanos
no recuerda
Por eso compañero le pregunto
¿Existe aún el tren siberiano
de la propaganda reaccionaria?
Ese tren que pasa por sus pupilas
Cuando mi voz se pone demasiado dulce
¿Y usted?
¿Qué hará con ese recuerdo de niños
Pajeándonos y otras cosas
En las vacaciones de Cartagena?
¿El futuro será en blanco y negro?
¿El tiempo en noche y día laboral
sin ambigüedades?
¿No habrá un maricón en alguna esquina
desequilibrando el futuro de su hombre nuevo?
¿Van a dejarnos bordar de pájaros
las banderas de la patria libre?
El fusil se lo dejo a usted
Que tiene la sangre fría
Y no es miedo
El miedo se me fue pasando
De atajar cuchillos
En los sótanos sexuales donde anduve
Y no se sienta agredido
Si le hablo de estas cosas
Y le miro el bulto
No soy hipócrita
¿Acaso las tetas de una mujer
no lo hacen bajar la vista?
¿No cree usted
que solos en la sierra
algo se nos iba a ocurrir?
Aunque después me odie
Por corromper su moral revolucionaria
¿Tiene miedo que se homosexualice la vida?
Y no hablo de meterlo y sacarlo
Y sacarlo y meterlo solamente
Hablo de ternura compañero
Usted no sabe
Cómo cuesta encontrar el amor
En estas condiciones
Usted no sabe
Qué es cargar con esta lepra
La gente guarda las distancias
La gente comprende y dice:
Es marica pero escribe bien
Es marica pero es buen amigo
Súper-buena-onda
Yo no soy buena onda
Yo acepto al mundo
Sin pedirle esa buena onda
Pero igual se ríen
Tengo cicatrices de risas en la espalda
Usted cree que pienso con el poto
Y que al primer parrillazo de la CNI
Lo iba a soltar todo
No sabe que la hombría
Nunca la aprendí en los cuarteles
Mi hombría me la enseñó la noche
Detrás de un poste
Esa hombría de la que usted se jacta
Se la metieron en el regimiento
Un milico asesino
De esos que aún están en el poder
Mi hombría no la recibí del partido
Porque me rechazaron con risitas
Muchas veces
Mi hombría la aprendí participando
En la dura de esos años
Y se rieron de mi voz amariconada
Gritando: Y va a caer, y va a caer
Y aunque usted grita como hombre
No ha conseguido que se vaya
Mi hombría fue la mordaza
No fue ir al estadio
Y agarrarme a combos por el Colo Colo
El fútbol es otra homosexualidad tapada
Como el box, la política y el vino
Mi hombría fue morderme las burlas
Comer rabia para no matar a todo el mundo
Mi hombría es aceptarme diferente
Ser cobarde es mucho más duro
Yo no pongo la otra mejilla
Pongo el culo compañero
Y ésa es mi venganza
Mi hombría espera paciente
Que los machos se hagan viejos
Porque a esta altura del partido
La izquierda tranza su culo lacio
En el parlamento
Mi hombría fue difícil
Por eso a este tren no me subo
Sin saber dónde va
Yo no voy a cambiar por el marxismo
Que me rechazó tantas veces
No necesito cambiar
Soy más subversivo que usted
No voy a cambiar solamente
Porque los pobres y los ricos
A otro perro con ese hueso
Tampoco porque el capitalismo es injusto
En Nueva York los maricas se besan en la calle
Pero esa parte se la dejo a usted
Que tanto le interesa
Que la revolución no se pudra del todo
A usted le doy este mensaje
Y no es por mí
Yo estoy viejo
Y su utopía es para las generaciones futuras
Hay tantos niños que van a nacer
Con una alíta rota
Y yo quiero que vuelen compañero
Que su revolución
Les dé un pedazo de cielo rojo
La habitación cobija los cuerpos embriagados de pasión ciegos de deseo Se besan se acarician se rozan se retuercen se estremecen mutuamente sin cesar como recuperando el tiempo sin verse Pero luego de la agitación la plenitud se apodera de sus almas pues la necesidad del otro es tan grande que desaparece al abrazarce al apapacharse al acariciarse el alma
Es un día gris
Un día donde la neblina
es más espesa y envolvente
Es un día lento
mucho más que los anteriores
porque ya no estás jodiendo
con el cambio de música
porque no estás gritando
porque no estás viendo noticias regionales
y lo único que puedo hacer
es escuchar toda la música
que desde niña me hacías escuchar
Cómo quiero beber contigo
porque en estos momentos
tendrá otro significado
porque será contigo
"Siete días" fue todo lo que ella escribió algo así como una nota de ultimátum fue lo que me dio. Cuando creía que el campo estaba despejado un nuevo obstáculo apareció para desafiarme, pobre de mí. Aunque odio tener que tomar una decisión mis opciones están disminuyendo aceleradamente, bien vamos. Creo que esta vez no va de farol tengo que conquistarla es sencillo de entender es él o yo. Lunes podría esperar hasta el martes si me preparo mentalmente El miércoles sería un buen día El jueves está en mi mente Viernes dame tiempo Sábado podría esperar pero el domingo sería demasiado tarde. El hecho de que él sea tan alto podría infundir miedo en otros hombres pero en mí la gran pulga ¿huiría? Al preguntarle si era un hombre o un ratón el espejo chirrió y salí corriendo. Me matará la hora del té no me preocupa en absoluto mi rival es un neardental eso es lo que creo Puede que necesite un trago aquí un test de inteligencia no es un problema acabaremos jugando scrabble pero tengo miedo de que ella decida Necesito una cerveza. Lunes podría esperar hasta el martes si me preparo mentalmente El miércoles sería un buen día El jueves está en mi mente Viernes dame tiempo Sábado posría esperar pero el domingo sería demasiado tarde.
Siete días pasarán rápidamente
En resumen, la quiero tanto.
Siete días, son tantos caminos
pero no puedo huir.
Lunes podría esperar hasta el martes si me preparo mentalmente El miércoles sería un buen día El jueves está en mi mente Viernes dame tiempo Sábado podría esperar pero el domingo sería demasiado tarde.