
¿Adónde quedó la conquista?
¿Adónde quedó la libertad?
¿Adónde quedé yo?
¿En qué lugar de tu escala de prioridades estoy yo?
Dejé todo por seguir nuestro sueño,
pero sólo fui yo.
Me sacaste de mi espacio sin fin
para llevarme a uno limitado y monótono.
Siempre dije lo importante que es para mí volar;
salir sin decir nada y volver sin más.
Nunca te mentí de mi condición de soñadora social,
nunca te mentí que odiaba la rutina,
nunca te negué que no quería hijos;
y ahora haces todo lo que yo no quería.
Todo lo que en el fondo pensé que sucedería.
¿Se puede seguir amando, cuando te cambian?
¿se puede seguir amando, cuando se habla un monólogo?
¿se puede seguir amando, cuando te atan?
¿se puede seguir amando, cuando la sensación de estafa te gana?