jueves, marzo 19, 2009




Apareciste como un cometa,

ésos que pasan una vez por la tierra.

Y fue ese fulgor,

esa explosión que causaste en mí,

la que remeció mi vida y mi corazón.


No fue tu voz,

no fue tu mirada,

tampoco tu cuerpo

ni tu sonrisa.

Simplemente fue tu visión de la vida,

tu sentido del humor;

hasta tu mala ortografía.

Tu sencillez conquistó mis días y mis noches,

tu sinceridad apasiguó mis miedos,

tu pasión estimuló a la mía,

tu alegría esfumó mis tristezas.



Un nuevo horizonte despierta ante mí

y me ofrece una ruta llena de aventuras y riesgos.

Sin embargo, hoy no me siento sola,

porque en cada pisada que doy,

siento tu mano que se entrelaza con la mía.

martes, marzo 03, 2009

Andar y Tropezar

Esta noche me acompaña la luna.Pero es una luna diferente. Ya no me causa pena ni
melancolía. Hoy puedo verla, observarla en la inmensidad de su hogar, sentir el
viento del verano, oír los ruidos nocturnos.

Las cortina ya no están cerradas, el paisaje invade mi pieza y mi pieza acepta está
nueva visita. Todo muta, todo se transforma a mi alrededor. La quietud se fue a
pasear, en cambio el movimiento se ha quedado, permanece fiel a mis pasos.No me
causa temor; no me importa perder o arriesgarme nuevamente, pues hay una voz
interior que me grita desesperadamente, que lo haga, que no dude.


Después de tanto andar, de tanto tropezar y terminar con mis rodillas lastimadas;
hoy llegué a mi camino, al destino al cual siempre quise llegar. No me importa
cuánto dure, lo que me importa es que pueda entregar todo lo que tengo para ofrecer.
Quiero ser realmente feliz, pero sobre todo darte la felicidad que no pudiste sentir
en algún momento. Sé que lo conseguiré, pues hay señales por todas partes. Así que,
estás condenado ha tenerme a tu lado, lo que sea necesario para ti.